EL CAMINO DEL
AUTOCONOCIMIENTO

No hay crecimiento personal o desarrollo espiritual sin auto-conocimiento.
No hay éxito, alegría, sanación o perdón verdaderos
si no recorremos primero el camino que conduce
al descubrimiento continuo de uno mismo.
En ese camino, toda sombra es comprendida y toda luz reconocida…
Ambas son amadas y es en ese amor, que nos descubrimos libres.

Mientras que los caminos espirituales pueden parecer lejanos o incluso irreales para las personas con una fuerte preferencia fuertemente racional. el auto-conocimiento en cambio resulta atractivo y sensato para casi todos. En realidad no son tan distintos. La dimensión espiritual no pasa por creer en fantasmas o creer en divinidades protectoras, sino simplemente en descubrirnos vinculados a lo que nos rodea, ya sean personas, nuestra comunidad, la naturaleza o el mundo interplanetario.

A menudo hablo de estos caminos como la dimensión concreta y la dimensión abstracta de nuestra existencia. En el lenguaje de los toltecas esos dos lados se llaman Tonal y Nagual y no son contrarios ni enemigos, sino sagrados y complementarios. El auto-conocimiento es tarea obligada y herramienta central para nuestra vida de todos los días, nuestras relaciones familiares y personales, para nuestro trabajo y nuestros proyectos. Para aportar a nuestra comunidad.

En un sentido amplio tanto la terapia, como el yoga, la meditación, las actividades no disruptivas en la naturaleza, el psicoanálisis, una peregrinación espiritual o una conversación honesta con un ser querido, en la que se confiesan cosas importantes que estaban ocultas, son todas experiencias de auto-conocimiento. Si somos observadores de nosotros mismos, toda experiencia aporta a este camino.

Cuando las personas tienen problemas, a veces acuden a un cura, o a un psicólogo, a un psiquiatra o a algun tipo de sanador. Les pueden aconsejar orar, confesar, hacer terapia, tomar medicamentos o realizar algun ritual. Pero todos esos procedimientos son de poca consecuencia si no se trabaja también en el proceso mas importante. Descubrir quienes somos, que hacemos, que resultados obtenemos por lo que hacemos, porque somos así y que es lo que realmente queremos, es el trabajo central. Sin él, todo lo demás tendrá pocos resultados.

De manera general, todo lo que hago en mi trabajo con personas, ya sea con grupos o de manera individual, van enfocados hacia el camino del auto-conocimiento. La naturaleza es sin duda el mejor espejo para conocernos porque no reacciona ante nuestra importancia personal u auto-conmiseración. Pero los seres humanos somos un espacio interior infinito que se proyecta, transforma, crece o se disminuye en nuestra interacción con los demás. Tenemos muchos lados y muchos yoes. Por eso no es una tarea de corto plazo sino el reto de toda una vida. Un reto muy satisfactorio porque cada avance, cada descubrimiento nos trae vida.

Libros recomendados para el Camino del Auto-conocimiento:

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